Historias de una mente perdida, nudo, la batalla

Y así se inició la batalla, mi mente, hasta entonces en blanco, comenzó a generar lo que sería el lugar de mi guerra. La luz es preparo para la batalla, criaturas infames de los más altos círculos de la bondad, carentes de cordura, surgieron de la nada. Miles de suministros las equiparon y prepararon. Ira por su parte invocó las criaturas abisales de las profundidades del odio, armadas con la más grande de las locuras.La batalla era desigual, mis tropas eran superiores en número pero inferiores en categoría y armamento, el desarrollo de la batalla estaba en el punto más álgido, los dos nos preparamos para la guerra. Pese a estar en desventaja mis tropas disfrutan de algo que ira no tiene, o no al completo, la posibilidad de controlar mi mente. Miles de criaturas de luz pura levantaron sus armas al unísono y los gritos y cánticos de la batalla ocuparon el espacio completo que nos rodeaba.

Ira se preparó bien, más de lo que yo esperaba, Odio es un gran estratega y Locura una de las mejores armeras que existe. Oh Cordura, cuanto siento haberte abandonado, cuanto siento no haber estado a tu lado, haber confiado en ti  haberte protegido de la oscuridad... Tu sufrimiento no habrá sido en vano, hoy te vengaré y haré lo que tendría que haber hecho hace mucho, cortarles la cabeza a Odio, a Locura, y sobretodo a Ira, todas esas fuerzas del mal que tanto me han atormentado.

Alcé mi vista, subido a mi atalaya vi todos mis dominios, vi como los volcanes de todo mi mundo mental estallaron a mi voluntad, vi como miles de meteoritos comenzaron a asolar la tierra, vi como los lagos cambiaron el líquido de la vida, el agua, por magma. Vi también como los árboles morían  abrasados, como los animales buscaban refugio sin éxito, vi como todo lo que era vida se convertía en muerte, vi como yo mismo destruí lo poco hermoso que quedaba en mi mente. Ahora era todo yermo, un yermo por el que desfilaban las tropas enemigas, cargando sin descanso contra mis criaturas, y lo hice, creé el sol que iluminó el campo de batalla, a mis espaldas nuestro propio astro rey iluminaba la sangre y los golpes, se filtraba a través de los gritos y ruidos de la batalla. En mi atalaya, viendo la batalla oyendo los gritos, gritos de dolor, de sufrimiento, de victoria, de derrota, gritos de miedo... ¡Gritos de batalla! algunos fuertes otros ahogados en su propia sangre, en sus propias vísceras. Es el sonido de la guerra, el estremecedor sonido de la guerra, implacable, inaudito.. Mis tropas menguan y reculan hacia el castillo, pierden terreno, las abisales criaturas de Ira avanzan sin parangón. Pero no hay rendición, hoy es el día de los héroes queridos guerreros ¡Luchad hasta la muerte o la victoria!

Y ahí esta ella, en lo alto del cielo, Ira, rodeada de tentadora oscuridad, llamándome, mi amada Ira, tan bella, tan tentadora, tan perfecta e impoluta... Noto de golpe como una flecha atraviesa mi hombro, retornándome a la realidad mi ejercito está de nuevo dentro de mi castillo, y las criaturas abisales lo están destrozando ¿Estoy... perdiendo? Las criaturas de la luz no son rivales para el ejército de Ira... Las cosas no podían ser tan sencillas querida reina, no este día ¡A ti te invoco Alegría! y así, en un estruendo de luz apareció Alegría con su ejército, con mi verdadero ejército, Criaturas de los más altos eslabones de la luz, mucho más que las tristes abisales de Ira, atacando desde su flanco derecho e izquierdo. La batalla da un giro estrepitoso a mi favor. La batalla ha avanzado tal y como me esperaba, Ira ha caído en mi emboscada, Las torretas se levantan de la nada en su retaguardia, y en ataque coordinado aplastamos sin compasión a las pobres tropas de la oscuridad.

Es el momento de adentrarse en territorio enemigo avanzo a lomos de mi ángel en forma de pegaso, alzando mi lanza y tras de mi vienen mis generales y sus tropas, Bondad y Alegría. Veo sonriente como la cara de ira cambia, su ejercito ha caído, ya no vence en esta guerra, ya no maneja el curso de mi mente, ya no es dueña de mis acciones, ahora yo domino esta batalla, yo domino mi mente, yo domino a mis generales, ahora más que nunca, mi sol ilumina el camino con la fuerza de mil dioses. Los puestos avanzados, los castillos y cuarteles de Ira caen por cientos ante el implacable avance de  mis criaturas ejemplares, tres círculos por encima de sus pobres abisales.

Y ahí se encuentra, el final de nuestro avance, la impenetrable fortaleza de Ira. Un muro de más de cincuenta metros se levanta delante de nosotros, cientos de torretas rodean la entrada, y apostados en el muro arqueros y ballesteros que se cuentan por miles. En su interior el último ejercito de Ira de Locura y Odio, la carga contra la fortaleza es brutal, del cielo caen nuevamente los meteoritos que destrozan centímetro a centímetro las defensas y los muros de su fortaleza. ¡Adelante ejércitos de luz es nuestra única oportunidad de vencer a la oscuridad! Mis criaturas ejemplares os destruirán a los tres, lo juro. Pero... ¿Por qué esa sonrisa Ira? ¿Qué demonios te hace tanta gracia? Tus dos generales están apunto de morir, están apunto de pagar el crimen que cometiste... Y tu sonríes...

De golpe el suelo tiembla, se rompe, crecen montañas y depresiones de la nada, está controlando mi mente, y no puedo hacer nada ¡Mierda, Ira deja de controlarme! Mis tropas son grandes, demasiado como para evitar caer, como para evitar las fisuras del suelo, como para evitar los golpes que propicia la tierra al elevarse, mis criaturas son torpes, demasiado grandes... Locura agoniza sonriente, con la lanza de Bondad en su corazón y Odio yace muerto en un mar de sangre y tripas, muerto a manos de Alegría, pero Ira se ríe, su carcajada infernal atraviesa nuestros corazones y veo como señala a mi retaguardia... ¿Pero que? no puede invocar a más generales, quien avanza hacia nosotros... Veo como ira desciende de su trono, su ejercito, pequeño pero poderoso aparece, ejemplares, estamos rodeados, los flancos están ocupados por los ejércitos de Ira, delante nuestro la misma Ira, y avanzando a nuestras espaldas... no sé quien demonios es...

No hay comentarios:

Publicar un comentario